El pasado sábado 30 de agosto se cumplieron setenta años de la bendición del Santuario de Arantzazu, y el próximo 9 de septiembre se recordará también el 75º aniversario de la colocación de la primera piedra del actual templo, acontecimiento que tuvo lugar en 1950 coincidiendo con la festividad de Nuestra Señora de Arantzazu, patrona de Gipuzkoa.

La historia de este lugar de fe se remonta a la segunda mitad del siglo XV, cuando se levantó la primera iglesia en torno a la aparición de la Virgen. Desde entonces, el Santuario ha conocido sucesivas transformaciones. La actual edificación se alza sobre una ampliación previa realizada en 1920, y constituye hoy uno de los rincones más significativos, artísticos y espirituales de Gipuzkoa.

Bienaventurada Virgen María de Arantzazu

Como es tradición, el 9 de septiembre, solemnidad de la Virgen de Arantzazu, se celebrará la misa principal en el Santuario a las 12:00 del mediodía. La eucaristía estará presidida por D. Fernando Prado Ayuso, obispo de San Sebastián, quien se unirá a los fieles y peregrinos en esta jornada festiva y mariana.

Arantzazu continúa siendo un faro de fe, arte y devoción en el corazón de Gipuzkoa, lugar donde la historia y la espiritualidad se encuentran, invitando a todos a redescubrir la belleza y hondura de este santuario singular.