¡Felicidades HURKOA!

El pasado 20 de noviembre, Hurkoa celebró su 35 aniversario con un cálido acto celebrado en el salón Carlos Santamaría de la UPV (Universidad del País Vasco).
Hurkoa lleva años ayudando a personas mayores en situación de fragilidad, dependencia o desprotección como a personas con enfermedad mental.
Fue una jornada muy productiva. José Ángel Martínez, presidente del Consejo General del Notariado, pronunció la conferencia “Apoyos voluntarios a la discapacidad”.
Antes de que David Mayor, fiscal de la Unidad de Discapacidad y Mayores de la Fiscalía General del Estado, y Javier Zubizarreta, ex alcalde de Azkoitia, recibieran la H de Oro de Hurkoa, en nombre de la Diócesis de San Sebastián, el vicario general, Mikel Aranguren, hizo llegar a las personas congregadas, unas sentidas palabras.
Entre otras, señaló que:
– “Desde su creación, Hurkoa ha tenido vocación de ser más que una estructura o proyecto. Ha querido, y ha logrado, llegar a ser un signo vivo del Evangelio, llevando adelante un proyecto que pone en el centro la dignidad humana, sobre todo la de los que más sufren”.
– “En nombre de la Diócesis quiero expresar, en primer lugar, un profundo agradecimiento. Muchas gracias a las personas pioneras, a las que soñaron y a las que dieron los primeros pasos, muchas veces sin saber lo que vendría después”.
– “Muchas gracias también a las personas y familias que han ayudado a Hurkoa y han depositado su confianza en la fundación”.
– “Los proyectos desarrollados por Hurkoa a lo largo de estas décadas han tenido como objetivo atender y apoyar a las personas mayores en situación de discapacidad, dependencia, desprotección o fragilidad o enfermedad mental, promoviendo su autonomía y bienestar, y garantizando sus derechos, libertades y participación en la comunidad”.
– “Hoy estamos ante un mundo que va cambiando rápidamente. Inmersos en estos cambios, nadie puede quedarse al margen, y para ello proyectos como Hurkoa son más necesarios que nunca. Nuestra sociedad debe de enfrentarse a nuevos retos: desigualdades a veces evidentes, soledad no deseada, migraciones, fragilidad emocional, violencia que a veces entra en nuestras relaciones, la pobreza de algunas personas, el futuro incierto de tantos jóvenes”.
– “Hurkoa es un hermoso ejemplo de cómo debe de materializarse la fe en las acciones, y de cómo la Iglesia puede trabajar con hombres y mujeres de buena voluntad para construir una sociedad más justa y fraternal”.
He aquí la intervención en su integridad de Mikel Aranguren, vicario general de la Diócesis de San Sebastián.