La Diócesis de San Sebastián ha comenzado en sus parroquias el curso de catequesis 2024-2025 con gran entusiasmo, cada una adaptándose a su realidad, que, aunque varía en número de niños inscritos, comparte la ilusión y las ganas de afrontar un curso en el que seguir transmitiendo la fe.

En la Parroquia de San Ignacio, en Gros, están especialmente contentos con la inscripción de 30 niños y niñas en el primer curso de catequesis. Este crecimiento ha llenado de alegría a la comunidad, que se prepara con dedicación para acompañar a estos pequeños en su camino de fe.

Por su parte, en la Parroquia de la Sagrada Familia, en Amara, los viernes se viven con mucha ilusión. Allí, un grupo cercano a la veintena de niños y niñas se reúne semanalmente para participar en la catequesis, compartiendo momentos de formación y convivencia en un ambiente de alegría y compromiso.

Mientras tanto, en Hondarribia, el inicio del curso de catequesis tuvo lugar en el emblemático Santuario de Guadalupe, el pasado domingo. La jornada comenzó con la celebración de la Eucaristía, donde las familias presentaron sus intenciones, las mismas que depositaron durante la romería de familias del 25 de mayo y que habían sido conservadas en el camarín, a los pies de la Virgen de Guadalupe. Tras la misa, los asistentes compartieron un pequeño aperitivo en la hospedería del Santuario, cerrando así una mañana llena de fraternidad y devoción.

El inicio de curso en las diferentes parroquias refleja el compromiso de la Diócesis de San Sebastián con la formación en la fe, y la importancia de caminar juntos como comunidad cristiana. Las parroquias, con alegría y esperanza, continúan su labor de acompañar a los más jóvenes en su encuentro con Cristo.